miércoles, 6 de octubre de 2010

Riesgo en las aperturas de dos débil. Sobre todo las muy débiles.

Philip Alder del NYT comenta esta mano del inicio del Campeonato del Mundo con el Campeonato de parejas mixtas. Dice que la apertura de dos débil puede tener sus inconvenientes y pone este ejemplo.

La apertura de Oeste es un poco suicida pues ni el más optimista puede ver más de tres bazas…Manuel nos habría echado una buena bronca. Este hace un barrage pero Sur, valiente, marca 3ST.

En otras mesas Oeste no abrió la subasta pero el contrato fue en la mayoría de los casos 3ST por Sur. Después de la salida de pico para A♠ y Q♠ de Este, los declarantes consideraron que no había riesgo en hacer el impás de diamante con la idea de hacer unas cuantas bazas más. Sorpresa, Oeste toma con el K y se hace cuatro picos para dos abajo.

En esta mesa, el declarante sabe que después de A ♠, Q ♠, a Oeste le quedan cuatro picos y decide no hacer el impas de diamante. Sabia medida. Cuenta sus bazas. Un pico, tres corazones, un diamante, y cuatro tréboles. Para hacerse los cuatro tréboles tiene que afirmarselos sin que entre Oeste, un clásico. Sale de 6♣ y Oeste hace lo que puede poniendo su J♣ que el declarante toma con el A♣. Ahora vuelve a su mano con un corazón y juega el 10♣. Como Oeste no cubre deja pasar y afirma sus cuatro tréboles para hacerse el contrato.

Lo que viene a decir el amigo Alder es que no hay que olvidarse que las voces que se dan en la subasta las oyen los cuatro jugadores, y que hay veces que es mejor estar callado. Desde luego lo que no hay que hacer es abrir tan a la lo loco, como en este caso. Das información y engañas a tu compañero.

Un abrazo.

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