Este artículo es del periódico
Expansión de 6 de septiembre de 2.011.
Pablo, un gran jugador y un gran hombre de negocios, habla de su pasión por el bridge.
SOCIO DE GBS FINANZAS
Pablo Gómez De Pablos: "El ‘bridge’ requiere reflexión y estrategia"
Pablo Gómez de Pablos es conocido por su vinculación al mundo de los negocios, pero su faceta como jugador de cartas merece un punto y aparte. Él es el actual campeón de España de equipos mixtos de bridge y de la modalidad open, así como subcampeón de España por parejas de un juego de cartas que a penas practican unas pocas miles de personas en nuestro país.
“En EEUU hay 20 millones de personas que juegan al bridge. En España, gusta mucho más el mus o el póquer que se ha puesto tan de moda ahora, pero lo realmente bonito del bridge es que está muy enfocado a la competición”. Eso es precisamente lo que más motiva a Gómez. “Yo no juego a las cartas por jugar o por pasar el rato como cuando juego al mus. Yo juego al bridge por la competición y por la oportunidad que tengo de ganar”, afirma este experto en finanzas.
Pablo Gómez de Pablos es tan competitivo en el juego como en la empresa. “El bridge requiere mucho entrenamiento, mucha reflexión. Es un juego de estrategia. Hay que tener visión para anticiparse a las jugadas” y puede que sea aquí precisamente dónde más paralelismo haya con su trabajo. “En el bridge, como en la vida, se gana muy pocas veces, pero si el conjunto de actuaciones que haces a lo largo del año es razonablemente bueno, el grado de satisfacción es muy alto”, afirma Pablo acostumbrado a ganar y a perder muchas veces.
Deporte olímpico
“El bridge es un deporte, y como tal, forma parte de la Familia Olímpica”. Esta frase que Gómez repite, no es suya. Es del padre del olimpismo español, Juan Antonio Samaranch. “Nadie duda de que el ajedrez es un deporte y el bridge es muy parecido. Habría que fomentarlo en los colegios y en las universidades. En Cataluña ya lo hacen y han tenido éxito. Se aprenden muchas cosas, por ejemplo respeto a los demás” competitividad, capacidad de evaluar riesgos y concentración. Él le inculcó este juego a una de sus hijas y “quien sabe, a lo mejor algún día podemos formar pareja. Ahora juego con Enrique Basabe y nos va muy bien juntos”.
“Empecé a jugar porque la madre de un amigo mío me animó a probar. Ella creía que yo tenía cualidades y me empujó a intentarlo. Me apunté a unas clases y aprendí. Después tuve que entrenar mucho porque no se puede jugar sin un entrenamiento previo. Es un pasatiempo que yo intento convertir en deporte”, afirma Pablo Gómez de Pablos. En España, hay muy pocos que puedan dedicarse profesionalmente a ello. “Los premios de los campeonatos van desde los 500 a los 1.000 euros. Nadie juega por el dinero. Se juega para ganar”.
¿Cómo se juega?
Es un deporte en el que se enfrentan dos parejas. Se juega con una baraja inglesa de 52 cartas.
Se reparten 13 cartas por jugador. Cada pareja acuerda una estrategia con un lenguaje codificado.
Deciden jugar un número de bazas e ir a un palo que consideren ganador. Es la fase de subasta.
Sumarán unos puntos dependiendo de lo lejos o cerca que se queden del objetivo marcado.
El juego en España al que más se asemeja es al tute subastado. Las posibilidades de jugadas son infinitas.
