“El Bridge es un juego de parejas”

“El Bridge es un juego de parejas” “El Bridge es un juego de equipo” Cualquiera de estas afirmaciones es cierta. Todos sabemos que necesitamos un socio para poder jugar. No obstante hay muchos jugadores que se olvidan de esto y tratan a su compañero como si fuese su enemigo.

Veo con frecuencia muchos jugadores que critican a su compañero en la mesa de juego,  a menudo de forma injusta y áspera, y desde luego de manera innecesaria.  La consecuencia es que el compañero queda tocado para seguir jugando, pierde la confianza en sí mismo, deja de disfrutar del juego, y desearía irse a casa.

Lo jugadores que actúan así suelen pensar que ellos son muy buenos jugadores. No se dan cuenta de que en este juego no hay jugadores buenos ni malos, hay parejas buenas y malas, porque este juego es un juego de parejas. 

El compañero es el fundamento del Bridge, es lo mejor que tiene un jugador en la mesa, con él se gana y sin él se fracasa. El mejor jugador del mundo puede fracasar si no tiene un buen compañero. De aquí se deduce que lo mejor que podemos hacer los jugadores es cuidar a su compañero, tenerle en consideración, apoyarle en los malos momentos, felicitarle en los buenos, hacerle la vida agradable, corregir los errores de manera natural tratando la corrección de manera objetiva y evitando personalizarlo, pidiéndole consejo, aportando ideas para la mejora de la pareja.